Entre exigencias de seguro agrícola y repudio a los transgénicos, se desarrolló la marcha de la FNC

La secretaria general de la organización, Teodolina Villalba, dijo que en abril harán voto castigo y que en el campo hay desesperación en aquellos pequeños productores que cultivaron algodón transgénico, por el fracazo rotundo del mismo y las deudas con que quedaron.

“Dos, tres meses nos preparamos para hoy”, explicaba uno de los más de 6mil agricultores que participaron de la 20º marcha de la organización. Teodolina calculó que fueron más de 7 mil, más personas que el año pasado.

En el ex Seminario Metropolitano un grupo de 20 hombres al mando de una mujer terminaba de cocinar el guiso de fideo con carne en 10 ollas gigantescas, a la leña. Frente al Parlamento, a la par que los discursos, se bajaba mandioca cocinada en ocho tachos.
La actividad anual había arrancado a las 8 y se desplegó por varias calles del microcentro, hasta arribar a las plazas frente al Parlamento, rodeada de policías de azul y caqui. Hacia las 11 hs se escucharon los discursos del acto central, que fue cerrado por la mencionada dirigente.

En conversaciones con BASE IS la misma dijo que este año, como en 2012, insistieron en la necesidad de un seguro agrícola estatal que proteja a las familias agricultoras de extremos climáticos y bajos precios.

En término operativos este subsidio, dijo, debería formar parte del Presupuesto General de la Nación, pero que no todo lo pondrá el Estado, sino también analizan una contraparte de los pequeños productores y productoras.

El pasado 20 de agosto el gobierno de Franco liberó el algodón transgénico BtRR, de la Monsanto, bajo una intensa publicidad sobre el rendimiento y rentabilidad del mismo. Esto fue un golpe duro a las cerca de 15 familias algodoneras de la FNC, que históricamente cultivan semillas de algodón convencionales y hasta de alta pureza.

En este mes de marzo cerró el ciclo de cosecha del algodón, contando ya la FNC con un análisis de los resultados de la campaña. En cuanto a las bases de la organización campesina, Teodolina Villalba dijo que hubo bajo rendimiento, debido a que el Ministerio de Agricultura y Ganadería-MAG no cumplió con sus asistencia técnica, además de la sequía y la presencia de plagas en las fincas.
Sobre aquellos pequeños productores que se aventuraron con el cultivo transgénico, la dirigente señaló que han monitoreado y que vieron el fracazo reinante. “No floreció bien, fue atacado por plagas, especialmente el perdillero”, dijo. Estima que en promedio cada familia se endeudó por un valor de un millón y medio de guaraníes por hectárea al comprar el paquete de semillas transgénicas y el kit de químicos.

En cuanto a las propuestas de la organización, Teodolina dijo que la exigencia del seguro agrícola ya han presentado a cuatro instituciones, entre ellas MAG y Crédito Agrícola de Habilitación-CAH. Más allá de las promesas, dijo, no hay nada concreto.

También explicó que la iniciativa de reproducir las semillas no-transgénicas IAN 425 están en duda de continuidad, debido a que, si bien el MAG entregó las semillas y otros insumos, no acompañó con asesoramiento técnico, lo que redundó en escasos resultados.

Dijo que en el futuro todo dependerá de revertir esa falencia.
Una vez más la dirigente aclaró que en las elecciones pesidenciales de abril irán a votar, pero en nulo, como ejerciendo un acto de protesta hacia las candidaturas.

FOTO: Momento de entrada de la movilización a las plazas frente al Parlamento.

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