Unos 21 campesinos muertos,496 imputados y 1400 detenidos marcaron la gestión del funcionario cuando estuvo al frente de la Fiscalía.
Desde las 8 AM de hoy lunes unas 30 personas se congregaron frente al edificio del Ministerio del Interior, en Asunción, donde repudiaron que Rubén Candia Amarilla haya sido nombrado como su titular.
Con Candia Amarilla como fiscal general del Estado (2005-2011), la Fiscalía cumplió un estratégico papel de represión y criminalización del campesinado que se organizaba y reclamaba por sus derechos más elementales y por revertir la histórica injusticia de la concentración de tierras anivel nacional, la mayoría de ellas malhabidas.
En ese periodo, la Fiscalía ejecutó centenares de desalojos, la mayoría de ellos de forma innecesariamente violenta, que produjeron la muerte de 21 campesinos. También imputó a al menos 496 campesinos y apresó a 1400.
En contrapartida, cuando se trataba de denuncias del campesinado hacia sectores latifundistas, contra amenazas a la vida, degradación ambiental, intoxicaciones y otros tipos de violaciones de derechos humanos, la Fiscalía se caracterizó por desentenderse o maniobrar en favor de los victimarios.
Con Candia Amarilla al frente, la Fiscalía no solamente criminalizó las protestas campesinas, sino también amedrentó a organismos de Derechos Humanos que investigaban los abusos estatales y presionó a jueces que entendían estas causas.
El nombramiento actual, para muchas organizaciones y ciudadanos/as, significa un retroceso para la democracia paraguaya y la garantía de más represión y violencia estatal, que lejos están de ser la solución al problema de fondo de la distribución de la tierra en nuestro país.
FOTO: Con pasacalles, pancartas y velas las manifestantes y los manifestantes rechazaron a Candia Amarilla; en cambio pidieron alguien con conocimiento de los derechos humanos.